La magia del “palmeo” y la relajación
Al comienzo del siglo pasado, el oftalmólogo Horatio Bates incursionó en un estudio alternativo a los métodos tradicionales de optometría y oftalmología después de descubrir la influencia del estado anímico en los resultados de la calidad de visión en sus pacientes.
Comenzó a explorar la relación entre un ambiente relajado y la calidad de visión. A los niños que en su consultorio leían temerosamente la cartilla, cuando les tomaba el examen, encontraba más fallas visuales.Entonces los mandaba a sentarse en la sala de espera por 20 a 30 minutos, cubrir sus ojos con las palmas de las manos, respirar profundamente y disfrutar de la oscuridad que obtenían al bloquear la luz.
Luego los invitaba nuevamente al consultorio para realizar un nuevo examen y encontró que el examen de refracción había mejorado drásticamente.
Desde entonces, sus pacientes recibían como tarea practicar todos los días de 10 a 30 min “el palmeo ocular” y volver para una segunda revisión. Los resultados fueron mágicos; algunos niños dejaron de usar sus gafas, otros mejoraban y otros requerían de otras prácticas adicionales para poder mejorar su visión.
Esta técnica hoy en día sigue vigente. La tecnología moderna es más exigente para los ojos, desde temprana edad estamos utilizando dispositivos electrónicos a una distancia muy cercana, condición que puede estresar los músculos oculares y afectar la forma del globo ocular. La teoría del Dr. Bates muestra esto como causa de la miopía o hipermetropía. Estos defectos refractivos hacen que acudamos al profesional de la salud visual para la prescripción de gafas o lentes de contacto.
Unos sencillos ejercicios, especialmente en los comienzos de la pérdida de visión pueden evitar este deterioro. Palmear y relajarse es la práctica más sencilla para descansar sus ojos y puede dejar grandes beneficios. Regálate unos minutos diarios y adquiere una nueva rutina
- Por ejemplo,2 min de palmeo cada hora cuando estas al frente del computador,
- o antes de dormir y al despertar toma de 5 a 10 min para palmear y descansar tus ojos.
- poco a poco puedes aumentar el tiempo del palmeo.
La mejor forma de palmear:
- Siéntate cómodamente
- Apoya los codos en una mesa o en un cojín sobre tus piernas
- Usa las palmas de las manos para cubrir los ojos sin oprimir los párpados. No hagas ninguna fuerza.
- Respira suave y profundamente
- Visualiza la oscuridad o el color negro
- Si la mente es muy activa, visualízate en un agradable paseo por la naturaleza y disfruta los colores y las formas de todo lo que ves. Utiliza este tiempo para recordar imágenes agradables.
- También puedes escuchar música suave de fondo que te ayuda a relajar.
Comienza hoy. No tienes nada que perder y de pronto se te abren nuevas puertas en el mundo de la visión y la relajación. Tus bondadosos ojos trabajan incondicionalmente todo el día, ellos te agradecerán una atención amorosa.
Por Leonor Schmidt M.